Este último tramo de la Vía Francígena del Norte te sorprenderá: ¿alguna vez esperarías encontrar una antigua calzada etrusca a la salida de Viterbo? ¿Y un anfiteatro romano construido en piedra toba? ¿Los restos de antiguas torres que se elevan entre los castaños? ¿Cascadas y restos romanos en la profundidad del bosque?
Esta parte del Lacio, llamada Tuscia (la tierra de Tusci, los etruscos) tiene todo esto y mucho más por descubrir, sorprendiéndote a cada paso a medida que te acercas más y más a Roma.
El último día del recorrido, la cúpula de San Pedro, bien visible desde el parque de Monte Mario, y los últimos pasos por las abarrotadas calles del Vaticano y entre las columnas de la plaza de San Pedro... y ya está, el lugar al que todos querían llegar, en el corazón de la Ciudad Eterna y de Italia.