La primavera y el otoño son las estaciones ideales para practicar senderismo . Disfrutará de temperaturas perfectas y un caleidoscopio de colores, ya sean las flores silvestres de los senderos o los tonos rojos y dorados de los viñedos y las hojas de los bosques.
La luz diurna es suficiente para mantener un ritmo pausado. Además, las delicias gastronómicas de septiembre y octubre son imperdibles, y las noches más frescas también son el momento perfecto para saborear platos más contundentes.